miércoles, 18 de mayo de 2011

Mi voto

Como siempre los culpables son los sometidos. No los que someten, engañan y ocultan. Tampoco se intenta atacar la raíz del problema, que a nivel mundial clasifica según la cantidad económica a las personas y deciden quien tiene derecho a vida y quien está sometido a la esclavitud perpetua.

Aunque nos hagan creer que la vida es el trabajo y un ocio limitado en las pocas horas en las que no tienes que llevar a cuesta tus obligaciones, mientras observamos cada día como viven en el lujo cuatro con corbata que prometen ser salvadores. Y son todos iguales.

Ir a votar es un derecho. Aunque algunos se alteran y quieren convertir en obligación que tu elijas a cualquiera de los mamones de turno. Son todos iguales. Porque los políticos son menos personas que cualquiera. Se reparten entre ellos beneficios, repartiendo a cambio las sobras para que nadie hable más alto de la cuenta.

Desde el punto cero al final me paso por los cojones la constitución, la biblia de nuestro tiempo. Enterraría la palabra democracia acompañada de cada político mentiroso que la pronunciara.